El tiempo pasa rápidamente... 0-1 Mes

Definitivamente Dios nos ama y somos hijos predilectos del universo!!!! Hemos vivido un mes difícil de describir ya que faltan palabras para todo lo hermoso que hemos aprendido... Con muchas expectativas, información, dudas, miedos, desvelos, ternura y sobre todo con mucho amor volando pasó el primer mes de la llegada de nuestro tesoro... Hoy miro atrás y recuerdo esa mirada y aquella piel cálida que abracé por primera vez, realmente la vida nos sonrió y la llenó de alegría con tu llegada, mamita estaba muy feliz de tenerte en sus brazos ya que eres la mejor muestra de amor. Debo confesar que no fue un mes fácil pero si divino....

Los primeros 3 días la pasamos en casa de tus abuelitos ya que papito seguía trabajando en casa afinando los últimos detalles, por lo que tu tía Ysbel nos ofreció su cuarto y la Chirri nos prestó su camita para que durmieras allí y pudiéramos estar cómodos, sin embargo como estabas muy pequeñito y prácticamente mamita pasaba el día solita en el cuarto, dormías sobre una almohada entre las piernas de mamá para que no tuviera que hacer mucho esfuerzo a la hora de la comidita o del cambio de pañal...

La comidita!!!.... que momento único he irrepetible, para mamá era algo indescriptible el hecho de tenerte pegadito a su pecho y saber que podía alimentarte al mismo tiempo que contemplaba tu mirada perdida en un universo nuevo para ti, dándote todo su amor y protección, que divina experiencia... Era mucho lo que dormías, algunas veces pasabas hasta 5 horas sin comer, pero eso si cada vez que comías debía cambiarte el pañal enseguida.

Todos en casa estaban muy contentos con tu llegada, tu Roro no se cansaba de verte a cada momento y tu tía Ysbel nos ayudó mucho esos días, de hecho los primeros baños te los dio ella, tu prima "la Chirri" enloquecía a diario con nuestra presencia, en lo que despertaba salía corriendo, tocaba la puerta del cuarto desesperadamente y gritaba bebé, bebé, bebeeee. Estando allí fueron a conocerte la Sra. Noemi y Alejandro Nobelino el Sábado 20 y quedaron impresionados por la cantidad de cabello que tenías a pesar de tener tan pocos días de nacido.

Luego ya instalados en casa tuvimos la visita de tu Yaya, aunque fueron pocos días, estabamos felices por su visita y ella también estaba muy contenta de haber podido venir a visitarte. A medida que pasaban los días era más fácil cumplir con la rutina del baño de sol, los cambios de pañales, las vitaminas y todas las cosas por hacer del día a día. Pronto mamá cumplió años y siempre dijo que quería celebrar su cumpleaños número 30 de una manera especial, algo que no pudiera repetirse y que recordaría por toda la vida y así fue!!! El mejor regalo de cumpleaños que recibió fue poder tenerte en sus brazos y justo ese día le regalaste tu ombliguito a mami. Ese mismo día nos tocó la primera consulta con la Pediatra y tu Yaya nos acompañó, en esa primera visita nos felicitaron porque a pesar del poco tiempo que tenias de nacido (tan sólo una semana) y de ser el primer bebé nos desenvolvíamos muy bien, te encontró sano gracias a Dios. Medias 48 cm y pesabas 3100 grs. No pasó mucho tiempo para hacerte la prueba del talón y colocarte las primeras vacunas, te portaste como todo un campeón, más era la angustia de mamá y papá que lo que sentiste!

Los días iban pasando y cada vez eran menos las horas para dormir y descansar; mamita aún no entiende como la gente dice: si el bebé duerme mamá también debe dormir, para ella fue casi imposible porque cuando tu dormías mamá aprovechaba de hacer las cosas y limpiezas de la casa.
En ocasiones debíamos meterte a bañar dormido y al entrar en la bañera y sentir el agua lo que hacías era llorar... Luego de un tiempo iniciamos la rutina del baño con ejercicios para las piernas, cuello y brazos, jugabamos con Koda y te tomabas tus vitaminas; ya a la semana la rutina del baño se hizo más placentera y disfrutabas viendo como mamita jugaba con el agua.

En ese primer mes vinieron a visitarte también: la Nena, los amigos de la universidad de papá, el primo José Francisco y la Tía Gloria con el Tío Juri y el primito Jurk, con todos ellos hicimos parrilla en casa y compartimos momentos hermosos.

Cuando apenas tenías casi 3 semanas de nacido y en el primer baño que mami te dio solita, al acostarte boca abajo para tu respectivo masaje, te volteaste rápidamente sorprendiendo mucho a mamá. Siempre tuviste un cuello fuerte, desde muy pequeñito al cargarte sobre el pecho debíamos tener mucho cuidado y sostener muy bien tu cabeza porque intentabas moverla hacia los lados, rápidamente reconociste las voces de papito y mamita y cuando los escuchabas volteabas para verlos y tu reflejo de aprensión era bastante fuerte.

Al cumplir un mes te llevamos nuevamente al control con la Pediatra, en esa consulta salimos algo raspaos con respecto a la pelada de tu pene y a la alimentación. Ese primer mes perdiste 40 gramos, por lo que la Doctora nos mandó a cambiar la rutina y el régimen alimenticio ya que dormías mucho, te distraías con el chupón y no comías casi nada, tuvimos que combinar la tetica con la formula. Al principio mamita se puso muy triste porque ella sólo quería darte tetica por todos los beneficios que da la lactancia materna pero luego comprendió que era importante que te alimentaras bien para que pudieras crecer sano y fuerte.

Y fue así entre una y otra cosa que se fue el primer mes más rápido de lo que nos imaginamos ...